Entrada invitada: Dr. Gómez Papi, inteligencia y lactancia materna
Entrada invitada
Nueva sección de neuronas en crecimiento que cede la palabra a expertos en otras áreas que enriquecen la perspectiva neuropediátrica de este blog.
La inaugura el Dr. Gómez Papi, de quien he tenido la fortuna de aprender ya que fue mi tutor durante el MIR. Pediatra y neonatólogo, especializado en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, desde 1985 es Pediatra Adjunto del Servicio de Pediatría del Hospital Juan XXIII de Tarragona. Pionero en España del método madre canguro y autor del libro El poder de las caricias.
Con la amabilidad y buen hacer que le caracterizan, ha contestado a una difícil pregunta que surge naturalmente al estudiar el desarrollo cerebral y que ya le hice cuando era su residente:
¿Influye la lactancia en el desarrollo de la inteligencia?
La gran complejidad del neurodesarrollo implica a múltiples factores genéticos y ambientales y cualquier carencia puede causar su detrimento. Especialmente importantes son los 2 primeros años de vida, en los que la alimentación y el vínculo con la madre van a ser esenciales.
Para centrar el tema le he propuesto que comente este artículo, de Belfort MB y colaboradores, sobre los efectos que tiene en la cognición infantil la duración y la exclusividad de la lactancia materna. Muy agradecida al Dr. Gómez Papi. Esta es su aportación.
Durante muchos, años he atendido a los niños con patología neurológica que eran derivados a nuestro hospital, hasta que la Dra. Mas se convirtió en nuestra neuróloga pediátrica. Y desde hace 20 años me dedico especialmente a la protección, promoción y apoyo a la lactancia materna. Mi trayectoria profesional me permite comentar el siguiente artículo desde una perspectiva poco común.
Leche materna y desarrollo
Para cada especie, un órgano, un sistema o un comportamiento son los puntos focales que determinan el tipo, la variedad y las interacciones de los nutrientes de la leche de sus madres. Los puntos focales del ser humano son el crecimiento del cerebro, la adquisición de un comportamiento afectivo o de relación y el sistema inmune.
Nacemos con solo el 25% del volumen que tendrá el cerebro desarrollado. La formación del restante 75% tiene lugar básicamente en los 2 primeros años y consiste en la mielinización y en la formación de innumerables sinapsis entre los 100.000 millones de neuronas. Hoy en día sabemos que la leche materna contiene ácidos grasos esenciales poli-insaturados de cadena larga ω-6 y ω-3 en abundancia y en una proporción de 2:1, exactamente la misma que se encuentra en las membranas celulares de las neuronas; que sus oligosacáridos transportan ácido siálico, que el lactante no puede sintetizar, y que es parte integral de la membrana plasmática de axones y dendritas; y que su alto contenido en lactosa permite la síntesis de los galactolípidos necesarios para la mielinización.
Al final del primer año se han formado tantas sinapsis que muchas de ellas se han de “podar”. Se eliminarán las que se han activado en muy pocas ocasiones y permanecerán las más utilizadas. Así pues, el desarrollo del cerebro humano depende también del trato que el bebé haya recibido. Cuántos más meses de lactancia materna, más probable es que la madre responda con mayor sensibilidad a las necesidades de su hijo y que el bebé establezca una relación de apego seguro con su madre. Los adultos que han disfrutado de una relación de apego seguro con su madre son personas más cálidas, más estables desde el punto de vista emocional, con relaciones íntimas más satisfactorias, más positivas, más integradas socialmente, se siente capaces y queridos, y tienen perspectivas coherentes de sí mismos. Una relación de apego seguro les aporta las armas emocionales adecuadas para una buena adaptación y relación social.
Estudios sobre lactancia materna e inteligencia
Con el objeto de estudiar la relación entre la duración de lactancia materna (LM) y el nivel cognitivo, y también con el consumo materno de pescado azul, Belfort y cols diseñaron un estudio de cohortes en el que acaban analizando a más de mil niños. A los 3 años les pasaron un test que correlaciona la comprensión verbal con el cociente intelectual: el test de vocabulario de imágenes de Peabody, y un test de capacidades motoras visuales; y a los 7, los test de inteligencia de Kaufman verbal y no verbal, y un test de memoria y aprendizaje. Encuentran que hay una relación estadísticamente significativa entre el número de meses de LM (ya sea exclusiva o mixta) y el coeficiente obtenido en los test.
No es el primer estudio que encuentra dicha relación, estadísticamente significativa pero con leve traducción clínica. En el test de Peabody, corregido para las variables demográficas que se sabe influyen en el nivel intelectual, la puntuación aumentaba 0.29 (0.12 to 0.47) por cada mes de LM; y en los test de Kaufman verbal y no verbal, 0.46 (0.28 to 0.65) y 0.38 (0.13 to 0.62) respectivamente. Para un niño que hubiera mamado durante 2 años, su test de Peabody aumentaría de 2’9 a 11’3 puntos; y los de Kaufman, de 6’7 a 15 y de 6’2 a 14’9. La población media obtiene una puntuación para cada uno de los 3 test de 85 a 115.
A favor de la lactancia materna
Aunque la OMS recomienda la LM exclusiva durante 6 meses y, complementada con otros alimentos, hasta los 2 años o más, son pocas las madres que amamantan hasta esa edad. En la última estadística publicada en Cataluña, solo el 22% de los bebés había mamado al menos un año.

Con un adecuado apoyo a la lactancia materna en el embarazo, en las maternidades y más adelante en los centros de salud y los grupos de madres; y un reconocimiento social a la importancia de una lactancia materna prolongada tal como recomienda la OMS que se tradujera en unas leyes que protegieran la conciliación familiar y laboral, las consecuencias clínicas entre la LM y la lactancia artificial serían mucho más evidentes.
_____________________________[sobre esta información]
Artículo: JAMA Pediatrics
8 Comentarios
Si comentas, todos aprendemos. ¡Gracias!
Gracias Dra. Mas por este aporte y al Dr.Gomez Papi, si me permite hacer uso de este contenido para los talleres que damos en Autismocba , estaré muy agradecido, por supuesto mencionando como corresponde la fuente y los autores.
Será un autentico honor y un placer. Gracias a usted por difundirlo.
Me gusta su página de Facebook: https://www.facebook.com/Autismocba.
¡Saludos!
Interesantes resultados. Sería interesante y oportuno también conocer qué resultados se obtendrían con niños alimentados con biberón en exclusiva por la madre, o misma figura, de forma que se aislara si el efecto beneficioso es el de la leche materna, o el del apego seguro y una dedicación y estimulación más exclusiva por una sola persona.
Saludos
Muchas gracias por tu comentario y por el interés en el artículo.
Efectivamente los estudios sobre los factores que influyen en el desarrollo de la inteligencia son muy complejos ya que hay una gran cantidad de factores de confusión.
Nos ha agradado este en concreto por ser muy cuidadoso con la valoración socieconómica de las madres, de modo que sí consigue comparar grupos bastante homogéneos de niños alimentados con LM o con biberón en exclusiva. Su novedad radica en que tiene en cuenta la duración de la LM y la alimentación de la madre.
Excelente articulo y totalmente de acuerdo con la opinión del autor. Pensar que la leche materna tiene ácidos grasos y células vivas, que las fórmulas intentan imitar sin éxito. Hace falta mas campaña igual de agresiva pero con fondo verdadero de los beneficios de la lactancia materna. Todos los comerciales que veo de fórmulas están basados en mentiras para las madres con tal de vender sus productos.
Lactancia Materna Exclusiva durante 6 meses y luego continuar de manera complementaria hasta los 2 años o mas…